Los geranios de Tres Magnolias

El otro día, durante este mes de abril, empezaron a florecer los geranios del patio de nuestro centro.

Este hecho, que no nos debería sorprender, puesto que es primavera, nos sirve para hacer una reflexión sobre lo que la naturaleza nos enseña cada día.

En este caso la enseñanza es que la naturaleza es generosa en grado sumo. 

¿Cómo es posible que estos geranios, que no han recibido cuidados especiales durante todo el año, que se han regado cuando ya no había más remedio, que no han sido podados a su tiempo, que no han sido abonados adecuadamente, vamos, que no han sido abonados, cómo es posible que florezcan y nos regalen estas flores de tan gran belleza?

Pues es posible. Y aquí tenéis la prueba gráfica

ImagenImagenImagen

La única explicación es esta: la naturaleza es tan generosa y agradecida que es capaz de hacerte regalos sorprendentes aunque no hayas hecho nada para merecerlos.

Los geranios no se parecen en nada a las personas.

A partir de ahora prometo mimarlos, darles todo lo que necesiten cuando lo requieran. 

Aunque no lo pidan.

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s